EVALUACIÓN DE ESTILOS DE PENSAMIENTO
La evaluación de estilos de pensamiento Benziger, que brindamos, es una herramienta utilizada para medir los diferentes patrones de actividad cerebral y la forma en que éstos afectan nuestro estilo de pensamiento y comportamiento. Cada persona tiene una forma única de pensar y procesar la información, y comprender estas diferencias es útil para el desarrollo personal y profesional.
Aplicaciones de la Evaluación de Estilos de Pensamiento
SELECCIÓN DE PERSONAL
La evaluación permite identificar el perfil correcto y adecuado a realizar una determinada tarea en la empresa. Si desea contratar a una persona para un puesto determinado, la evaluación de estilos de pensamiento Benziger permitirá conocer a detalle su dominancia cerebral y las actividades para las que es naturalmente eficiente dicha persona disminuyendo altamente o eliminando la alternativa de deserción del personal una vez contratado.
MEJORA DEL RENDIMIENTO
Al comprender cómo funciona su cerebro, las personas pueden desarrollar estrategias para mejorar su rendimiento en diferentes áreas, como el trabajo, los estudios o los deportes.
GESTIÓN DE EQUIPOS
Al comprender los diferentes estilos de pensamiento de los miembros del equipo, los líderes pueden crear equipos más equilibrados y efectivos al asignar tareas y responsabilidades de acuerdo con los puntos fuertes y debilidades de cada persona. También permite delegar funciones o intercambio de ellas en búsqueda de ser más eficientes
AUTOCONOCIMIENTO
La evaluación ayuda a las personas a comprender mejor sus propios patrones de pensamiento y comportamiento, lo que puede ser útil para la toma de decisiones y la resolución de problemas.
DESARROLLO PERSONAL
Al comprender mejor sus patrones de pensamiento, las personas pueden identificar áreas de mejora y trabajar en ellas para mejorar su capacidad para aprender, adaptarse y relacionarse con los demás.
ELECCIÓN DE CARRERA PROFESIONAL
Al comprender cómo funciona su cerebro, las personas pueden desarrollar estrategias para mejorar su rendimiento en diferentes áreas, como el trabajo, los estudios o los deportes.
